Un nuevo año sugiere nuevas oportunidades, y todos pensamos en cosas que podemos mejorar. Queremos que nos vaya mejor, y sabemos que en parte depende de nosotros: dejar de fumar, estudiar un idioma, adelgazar, hacer deporte, aprender algo nuevo...
El problema es que pretendemos conseguir estos propósitos solo a base de fuerza de voluntad. Y el resultado es el desastre: como mucho conseguimos cumplir nuestro propósito la primera semana, y a veces ni eso. Unos meses más tarde dejamos de pagar la cuota del gimnasio, volvemos a comprar el cigarros… y nos engañamos diciéndonos que será mejor intentarlo en verano, en vacaciones, que estamos más tranquilos.
Sin embargo, se puede hacer. Leyendo un escritor español que no recuerdo su nombre, comentaba que no se trata de fuerza de voluntad, sino de cambiar hábitos. Uno no se lava los dientes o se baña por las mañanas porque tenga mucha fuerza de voluntad, sino porque es lo que hace de manera rutinaria, casi siempre a la misma hora o en la misma situación. El hombre es un animal de costumbres, así que se trata de convertir nuestro propósito en una costumbre, algo que hagamos sin pensar y que incluso nos haga estar incómodos si un día no podemos hacerlo, como nos pasa cuando no podemos ducharnos o lavarnos los dientes.
¿Y como podemos convertir esos propósitos en hábitos? Estas son las claves:
Intenta uno cada vez.
No intentes a la vez dejar de fumar, aprender un nuevo idioma y acostarte antes. No harás ninguna de las tres cosas. En lugar de eso, céntrate en uno de los objetivos, y cuando lo hayas conseguido ve a por el siguiente.
No intentes a la vez dejar de fumar, aprender un nuevo idioma y acostarte antes. No harás ninguna de las tres cosas. En lugar de eso, céntrate en uno de los objetivos, y cuando lo hayas conseguido ve a por el siguiente.
Empieza por lo más fácil.
A lo mejor pasar de no hacer deporte a hacer una hora al día es excesivo. Plantéate una meta que puedas cumpir, incluso que creas que será demasiado fácil, como hacer diez minutos al día. De este modo, la sensación de triunfo que tengas al conseguirlo te hará más fácil abordar el siguiente objetivo.
A lo mejor pasar de no hacer deporte a hacer una hora al día es excesivo. Plantéate una meta que puedas cumpir, incluso que creas que será demasiado fácil, como hacer diez minutos al día. De este modo, la sensación de triunfo que tengas al conseguirlo te hará más fácil abordar el siguiente objetivo.
Plantéate una meta de 30 días.
Cualquier objetivo, si te lo planteas para toda la vida, puede ser intimidador. Es mejor plantearte un horizonte de un mes. Dejar de fumar durante un mes, o hacer deporte durante un mes, o dormir más durante un mes son retos más asumibles. El truco está en que es un tiempo suficiente como para desarrollar el hábito, y después será muy fácil continuar con él.
¿Esto es engañarte a ti mismo? Pues sí, pero el caso es que funciona. Los seres humanos somos tan crédulos que incluso nos podemos engañar a nosotros mismos, aunque sepamos que lo estamos haciendo. Y al fin y al cabo también nos engañamos a nosotros mismos, pero para mal, cuando nos decimos que mejor empezamos con el régimen mañana, o que hoy no iremos al gimnasio pero la semana que viene sí.
Plantea un objetivo medible
Tu objetivo no puede ser “hacer más deporte” o “beber menos”. Eso es muy difícil de medir, y es muy fácil engañarte a ti mismo con su cumplimiento. Es preferible “hacer 10 minutos de deporte” o “beber 2 cervezas en lugar de 5″. De este modo sabes perfectamente si lo estás cumpliendo o no.
Tu objetivo no puede ser “hacer más deporte” o “beber menos”. Eso es muy difícil de medir, y es muy fácil engañarte a ti mismo con su cumplimiento. Es preferible “hacer 10 minutos de deporte” o “beber 2 cervezas en lugar de 5″. De este modo sabes perfectamente si lo estás cumpliendo o no.
Haz público tu objetivo
Uno de los trucos más eficaces para cumplir nuestro objetivo es darle publicidad. La presión de mostrar ante otros que hemos fracasado es uno de los mejores acicates para animarnos a cumplir. Así que escribe tu objetivo en tu blog, o mejor explícalo a tu familia y amigos.
Si ya antes de empezar no te atreves a hacer esto por el miedo al ridículo si fracasas, es porque no te lo planteas en serio.
Crea una rutina
Plantéate un momento del día y una situación para cumplir con tu objetivo. Por ejemplo, para hacer deporte puede ser una buena hora el comienzo de la mañana, o por la tarde al volver del trabajo. Lo ideal es hacerlo justo después de un hábito que ya tengas establecido, como lavarte los dientes, de manera que este nuevo hábito se convierta en parte de la rutina que tienes al despertarte, al llegar a casa o antes de acostarte.Recuerda que el objetivo es conseguir convertirlo en costumbre, en algo que haces sin pensar.
Cambia un hábito negativo por otro positivo
Uno de los problemas con hábitos del tipo de fumar es que dejarlos crea un vacío. No es solo la adición a la nicotina, sino el condicionamiento que te ha programado para encender un cigarro y tenerlo en la mano en determinadas situaciones. En lugar de sumprimir directamente el hábito intenta cambiarlo en esas situaciones por otro positivo, o al menos neutro. Por ejemplo, masticar un chicle o jugar con un objeto pequeño si tu problema es que tienes que tener algo en la mano.
Insiste aunque algún día falles. No pasa nada si un día fracasas en tu objetivo. Puedes estar enfermo, o surgir un imprevisto. Pero no dejes que pasen varios días seguidos sin insistir en el hábito, o no conseguirás desarrollarlo.
Cuando consigas un objetivo, pasa al siguiente
Si llevas 30 días creando un hábito, ya es fácil dejarse llevar y mantenerlo. Ahora intenta con el siguiente. Puede ser aumentar la intensidad del conseguido (pasar de 10 minutos al día de deporte a 20, levantarte 30 minutos antes en lugar de 15) o intentarlo con uno nuevo.
Uno de los problemas con hábitos del tipo de fumar es que dejarlos crea un vacío. No es solo la adición a la nicotina, sino el condicionamiento que te ha programado para encender un cigarro y tenerlo en la mano en determinadas situaciones. En lugar de sumprimir directamente el hábito intenta cambiarlo en esas situaciones por otro positivo, o al menos neutro. Por ejemplo, masticar un chicle o jugar con un objeto pequeño si tu problema es que tienes que tener algo en la mano.
Insiste aunque algún día falles. No pasa nada si un día fracasas en tu objetivo. Puedes estar enfermo, o surgir un imprevisto. Pero no dejes que pasen varios días seguidos sin insistir en el hábito, o no conseguirás desarrollarlo.
Cuando consigas un objetivo, pasa al siguiente
Si llevas 30 días creando un hábito, ya es fácil dejarse llevar y mantenerlo. Ahora intenta con el siguiente. Puede ser aumentar la intensidad del conseguido (pasar de 10 minutos al día de deporte a 20, levantarte 30 minutos antes en lugar de 15) o intentarlo con uno nuevo.
Leyendo todo esto definitivamente me doy cuenta de que si se trata de eso: De hacer hábitos y no propósitos imposibles... Yo este año mi único propósito es estar bien físicamente y sentirme a gusto en todo lo que haga... estoy comenzando a hacer cambios en mi vida y sé que eso me ayudará mucho... aunque confesaré que eso de las dietas nomas no se me da... pero es necesario... así que adios taquitos y coca cola por unos dias (Entre semana) jajaja...
Y tu? Como vas con tus propósitos?
mi proposito de año nuevo es no hacer propositos de año nuevo jijiji
ResponderBorrarAsi es que a vivir la vida!!!
Mi propoósito de año nuevo es venir más seguido. Buen blog
ResponderBorrarTe agradezco mucho la visita a mi blog Alva. Veo que no actualizas este desde el 19, volveré. UN saludo!
ResponderBorrarHola! Alva , amiguita como has estadooo?? espero que muy bien
ResponderBorrares muy cierto lo que dices ...
yo estoy ahorita padeciendo uno y es que quiero bajar de peso ...y bueno lo dejo y lo dejo le doy largas ..
pero con los sabios consejos que me acabas de dar ..creo que los seguire al pie de la letra
Gracias !!!
Bonito fin de semana largooo
HERMANITA!!!
ResponderBorrarESTE INICIO DE AÑO NO ME HICE PROPOSITO ALGUNO PERO SABES QUE SE VAN DANDO POCO A POCO, HOY PUEDO PRESUMIRTE QUE EMPECE CON EL EJERCICIO Y ME SIENTO GENIAL, PROCURARE SER PERSEVERANTE.
TE ENVIO, COMO CADA DIA DE MI VIDA, UN ABRAZO ENORME.
TE QUIERO SIEMPRE MUCHO!!!
Pero Alva, no hay más que verte, rebosante de salud y belleza, para darse cuenta de lo innecesario de dieta alguna en tu caso. Aunque después de leer tan instructivo y enriquecedor texto a uno le dan ganas de plantearse algún objetivo serio:
ResponderBorrarNada de chocolate con leche ni de vino peleón, nada de largas sientas ni de películas tristes, nada de espejos incapaces de reflejarnos quitando algunos años y sus consiguiente marcas en arrugas, nada de risas huecas ni de hamburguesas industriales…y seguiría…seguiría… pero acabo de recordar que aquí, en su casa, la protagonista es mi querida amiga y yo tan solo soy un invitado capaz de disfrutar al pensar en que cada día escribe mejor, conservando, entre otras maravillosas cosas, un gran sentido de humor, muy saludable, por cierto.
Un gran beso.
Holaaaaaaaa!!
ResponderBorrarMi propósito para este año será volverme un adicto al 360!
jaja!
...y será tu culpa!
Saludos ;)