23 de octubre de 2008

Día de Muertos

Dos de las celebraciones más importantes de México se realizan en el mes de noviembre. Según el calendario católico, el día primero está dedicado a Todos los Santos y el día dos a los Fieles Difuntos. En estas dos fechas se llevan a cabo los rituales para rendir culto a los antepasados.Es el tiempo en que las almas de los parientes fallecidos regresan a casa para convivir con los familiares vivos y para nutrirse de la esencia del alimento que se les ofrece en los altares domésticos.La celebración del Día de Muertos, como se le conoce popularmente, se practica a todo lo largo de la República Mexicana. En ella participan tanto las comunidades indígenas, como los grupos mestizos, urbanos y campesinos. Estamos a una semana de llegar al Día de Muertos. Los seres humanos siempre han tenido un respeto especial hacia la muerte porque casi todas las culturas y religiones creen en la vida después de la muerte y en un espíritu que representa a cada persona que fallece, pero sin duda, es en México en donde la celebración se convierte en una de las principales conmemoraciones del año y en donde las tradiciones de miles de años siguen vivas.


Según la creencia del pueblo, el día primero de noviembre se dedica a los "muertos chiquitos", es decir, a aquellos que murieron siendo niños; el día dos, a los fallecidos en edad adulta. En algunos lugares del país el 28 de octubre corresponde a las personas que murieron a causa de un accidente. En cambio, el 30 del mismo mes se espera la llegada de las almas de los "limbos" o niños que murieron sin haber recibido el bautizo.La celebración de Todos los Santos y Fieles Difuntos, se ha mezclado con la conmemoración del día de muertos que los indígenas festejan desde los tiempos prehispánicos. Pero, hagamos un poco de historia, para ver de dónde viene esta celebración.

En las culturas prehispánicas, creían que una vez al año, los dioses permitían a los muertos visitar a sus familiares vivos, y que había de esperarlos con todo un festejo. Además, observaron que en el lugar en donde enterraban a los muertos y colocaban ofrendas, la tierra era más fértil, por lo que estaban seguros que la madre tierra les agradecía la ofrenda, con mejores cosechas. Los Aztecas, establecieron una fiesta dedicada a los difuntos, que se relacionaba con su calendario agrícola cuando iniciaba la cosecha, durante los meses ochpaniztli y teotleco, que era a fines de octubre y principios de noviembre. Durante esta celebración colocaban una ofrenda a los dioses domésticos llamados Manes, y sobre la tumba de los muertos, ponían petates, comida, objetos personales e instrumentos y decoraban con flores, ollas, collares y otros objetos. De ahí surgió la tradición de colocar ofrendas los muertos.


Los antiguos mexicanos, o mexicas, mixtecas, texcocanos, zapotecas, tlaxcaltecas, totonacas y otros pueblos originarios de nuestro país, trasladaron la veneración de sus muertos al calendario cristiano. Antes de la llegada de los españoles, dicha celebración se realizaba en el mes de agosto y coincidía con el final del ciclo agrícola del maíz, calabaza, garbanzo y frijol. Los productos cosechados de la tierra eran parte de la ofrenda.Los Fieles Difuntos, en la tradición occidental es, y ha sido un acto de luto y oración para que descansen en paz los muertos. Y al ser tocada esta fecha por la tradición indígena se ha convertido en fiesta, en carnaval de olores, gustos y amores en el que los vivos y los muertos conviven, se tocan en la remembranza. En Europa, la celebración del día de muertos, dentro de la religión católica empezó en el año 998, cuando San Odilón, instituyó el 2 de noviembre como la fiesta de los "Fieles Difuntos de la Iglesia Católica”, uniendo esta fecha a las del día de Halloween y Todos los Santos que también se relacionan con los muertos. Durante la época de la Colonia, los frailes españoles, quisieron prohibir las celebraciones de los indígenas, pero como no pudieron, decidieron unir las ideas y así la ofrenda se convirtió en un “altar”, en donde se colocaba también la imagen de algún santo católico. Esto agradó mucho a la gente, que no quería abandonar sus costumbres y fiestas y por eso ahora la fiesta del día de muertos es una mezcla de ritos religiosos, con cultos y mitos paganos de nuestros antepasados. El Día de Muertos, como culto popular, es un acto que lo mismo nos lleva al recogimiento que a la oración o a la fiesta; sobre todo esta última en la que la muerte y los muertos deambulan y hacen sentir su presencia cálida entre los vivos. Con nuestros muertos también llega su majestad la Muerte; baja a la tierra y convive con los mexicanos y con las muchas culturas indígenas que hay en nuestra República. Su majestad la Muerte, es tan simple, tan llana y tan etérea que sus huesos y su sonrisa están en nuestro regazo, altar y galería.Hoy también vemos que el país y su gente se visten de muchos colores para venerar la muerte: el amarillo de la flor de cempasúchil, el blanco del alhelí, el rojo de la flor afelpada llamada pata de león... Es el reflejo del sincretismo de dos culturas: la indígena y la hispana, que se impregnan y crean un nuevo lenguaje y una escenografía de la muerte y de los muertos



Gracias a esto, el 2 de noviembre, la “calaca", la “muerte”, la "flaca", la "huesuda", la "dentona" o la "parca" festejan su día y son las protagonistas de las procesiones, comidas y misas, en las que se combinan la alegría, el llanto y las leyendas, pero sobre todo, en donde se unen las familias en un lugar muy especial aquí en México: el panteón. Aunque cada región tiene su forma especial de festejar, existen elementos que son comunes en todo México, como: la visita al panteón, el altar u ofrenda para el difunto, las calaveritas de azúcar, el papel picado para decorar, el pan de muerto, los tamales y la flor mexicana llamada zempazuchitl. Durante la visita al cementerio, los familiares llevan la fotografía del difunto, su comida y bebida preferida. Lavan las tumbas y las decoran con flores y velas. Muchas familias pasan la noche completa y alegran el ambiente con música de mariachis. Entre la comida no faltan los tamales, el mole, el arroz a la mexicana, el pipián, las tortillas, el pan de muerto, dulces, frutas, vegetales, bebidas como aguardiente o pulque y café endulzado con piloncillo. Si el difunto era niño, le llevan juguetes de madera especiales de la época, alfeñiques y dulces. Muchas velas son encendidas para alumbrar el camino de las almas, mientras que las campanas de las iglesias se escuchan durante las noches, anunciando su llegada, al mismo tiempo que un fuerte olor a incienso, flores y comida inunda el ambiente.


El festejo dura de dos a tres días, en la madrugada del día 1° llegan las almas de los “muertos chiquitos”, o sea los niños y niñas y en la madrugada del día 2 se recibe a los muertos adultos quienes a las 12 del día y al compás de 12 campanadas se retiran a su morada perpetua. La fiesta termina el 3 de noviembre, cuando los muertos se han llevado la “esencia” de los alimentos. Se recogen los altares, se comparte la comida sobrante y se intercambian los adornos con los vecinos y familiares.
Yo personalmente, me gusta poner altares de muerto y festejar esta tradición. Si quieren más información acerca de este tema, de como poner un altar de muertos o de su significado, den click en los siguientes links... Un abrazo a todos...

4 comentarios:

  1. ...siempre supe que en Mx la forma de honrar a los muertos tenía un sabor especial...aunque no difiere mucho de Ecuador.

    Gracias por el minuto cultural eh!

    Besos Alva, y gracias, me fascina Mecano ;)

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  2. Hola , Alva

    Gracias por tu comentario
    tu post esta muy completo y muy bonito

    mis papás son de Michoacan, y
    me platican de Patzcuaro y Janitzio y no sabes , es tan bello , que se siente y dan ganas de estar ahi en esos dias

    Besos y bonito dia

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  3. si es bonita esta fecha yo soy de jalisco y ps me gusta ir a recordar a mis seres queridos y no solo ese dia voy seguido a visitar mi tio

    saludos que sten bien ^^

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  4. Estaba Alvita Blogueando,
    en sus muchos ratos de flojera
    cuando de pronto y sin pensarlo,
    que se le aparece la calavera..

    -'No me lleves querida Flaquita'-
    Decía desesperada y sin consuelo,
    y sin poder escapar de la Parquita
    Hoy yace 'Entre el cielo y el Suelo'..
    R.I.P

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